Sectorial de la semana
Comercio al por mayor: el poder detrás del consumo
En medio de la competencia, 15.765 empresas del comercio mayorista impulsan la oferta de productos de mejor calidad y precio. Su actividad permite el suministro de materias primas y maquinaria para la industria, el abastecimiento de alimentos y muchos productos al consumidor final.
El crecimiento de sus ventas por encima del promedio de la economía y la fuerte competencia reciente en las regiones hacen de este sector un caso interesante de movimiento económico y empresarial. Los invitamos a conocer los principales aspectos y tendencias del comercio al por mayor en Colombia.
Con buena competencia, inversión en tecnología y logística, el comercio mayorista impulsa la oferta de productos de mejor calidad y precio en la economía. Su actividad permite el suministro de materias primas y maquinaria para la industria, el abastecimiento de alimentos y muchos productos al consumidor final.
Con un aporte al PIB estimado en 3.7%, 15.765 empresas mayoristas emplean a 226 mil empleados. Aporta el 45% de las ventas del comercio y su evolución afecta los resultados del PIB sectorial que está constituido también por el comercio al por menor y las ventas de vehículos. El segmento más representativo del sector mayorista es el de electrodomésticos, con el 35,5% de las ventas, seguido por las materias primas agropecuarias (23,6%).
Encuesta anual de comercio 2013
El comercio al por mayor, aunque se afecta con los cambios del PIB total, ha registrado en los últimos 10 años tasas de crecimiento mayores y sostenidas en el tiempo. Las importaciones, actividad importante dentro del comercio mayorista, representan hoy el 28% del PIB mientras en el año 2000 aportaban el 17%.
Los importadores son sólo uno de los actores del comercio mayorista. Como se observa en el diagrama, las grandes cadenas de supermercados y los compradores de productos nacionales también son actores fundamentales en la cadena de abastecimiento comercial.
Las características de las empresas varían según su grado de sofisticación, el número y desarrollo de los canales que abastecen y los mercados que atienden. Existen mayoristas que son distribuidores únicos de productos de la industria local, con actividades homogéneas y pocos cambios en el tiempo. Otros distribuidores comercializan la oferta de la industria local y las importaciones y cada día buscan abarcar más productos. Si bien actores como las grandes cadenas ofrecen gran variedad de productos, otros comercializadores mayoristas están dedicados a ciertos sectores, como los del acero, los combustibles y la minería, los comercializadores de alimentos en Corabastos.
Los mercados que atienden también hacen la diferencia: los mercados regionales pequeños tendrán distribuidores pequeños que hasta hace pocos años no enfrentaban gran competencia y no tenían retos en tecnología o manejo más eficiente de los inventarios. Sin embargo, la expansión del comercio en las regiones está siendo una amenaza para este segmento. La llegada del comercializador mayorista directamente al consumidor final es otro de los grandes retos para los mayoristas tradicionales, que deben competir con empresas que prefieren menos intermediarios ofreciendo menor precio.
La compra de las mercancías es el centro del negocio mayorista y la administración de los flujos de dinero determina la rentabilidad del negocio. Para la compra de sus inventarios usan la financiación con mayor volumen y frecuencia que otras empresas, recursos que utilizan para el pago de las mercancías que compran, el transporte y el almacenamiento. Administrar los inventarios es la segunda actividad vital para estas empresas, donde rotar las mercancías y tener el nivel justo de inventarios son el ideal de toda empresa mayorista. No siempre comprar muchos inventarios puede ser rentable pues se afecta el flujo de caja y el mercado no siempre responde.
Las cifras de la Supersociedades revelan un crecimiento en las ventas promedio del 12% anual, superior al 10% del total de las ventas de las empresas de todos los sectores. La evolución de las ventas del sector es fluctuante, con grandes descensos o crecimientos que se asocian a la acumulación de los inventarios de cada sector. Los márgenes comerciales son bajos en los sectores asociados a los alimentos y materias primas pero la rotación es mayor, mientras la rotación de los inventarios es menor en la maquinaria, los electrodomésticos y equipos electrónicos, pero los márgenes son superiores.
Comparado con el comercio al por menor y el comercio de vehículos, el comercio mayorista registra el menor indicador de costo de ventas/ventas, factor que beneficia la rentabilidad del negocio y el pago de salarios más elevados frente al resto del comercio. Aunque el comercio mayorista genera el 30% del empleo sectorial, paga el 46% de los salarios del sector.
El segmento que asume los mayores consumos intermedios y costo de ventas es el de importaciones de materias primas agropecuarias, un segmento de márgenes más bajos pero una rotación más rápida de los inventarios. Mientras el promedio sectorial muestra un costo de ventas/ventas del 74,7%, el del sector es de 83,3% con un coeficiente técnico del 41.5%, el más elevado del sector. La actividad con menor coeficiente técnico en el sector es la de maquinaria y equipo, lo que indica que genera una mayor producción bruta por cada peso invertido en su consumo intermedio.
Una mirada a las empresas del comercio mayorista muestra que además de las grandes distribuidoras de combustibles como Exxon Mobil o Gunvor, carbón (Trenaco, Prodeco, Consorcio Minero Unido y Milpa S.A), las empresas de productos farmacéuticos (Tecnoquímicas, Procter&Gamble, Audifarma, Farmasánitas y Pfizer) las empresas de tecnología y los equipos electrónicos y electrodomésticos (Samsung, Nokia y Sony), determinan la evolución de las ventas del sector, al aportar el 60% de las ventas sectoriales.
Fuente: Cálculos EA con base en Supersociedades 2013