Sectorial de la semana
Esta es y así va la economía China en 2016
Además de su impacto en la coyuntura reciente de la economía mundial, resulta de interés ver los indicadores estructurales de la economía china, que muestran un desarrollo equilibrado a pesar de la desaceleración de su crecimiento económico.
La coyuntura 2016 de este país muestra indicadores de estabilidad macroeconómica y aunque su industria, motor de demanda de las materias primas del mundo, muestra crecimientos modestos, el crecimiento futuro se observa desde el consumo interno. Otras variables han mostrado resultados positivos y las proyecciones parecen mejorar, aunque preocupa la inversión privada.
Que características y cuál es la evolución de la economía china en los últimos meses? Estas son las cifras.
China es un país con 1300 millones de personas, donde se destaca una tasa de desempleo del 4,5%[1]. No obstante, el PIB per cápita es menor que el nuestro por lo que se considera un país de ingreso medio, principal desafío y clave del crecimiento futuro de esta nación.
En términos macroeconómicos, China registra un crecimiento del 7% promedio anual, basado en el desarrollo industrial y una transición hacia el fortalecimiento del sector servicios. Una inflación del 1,6% y variables que muestran su fortaleza económica en lo macro: una deuda externa del 13,2% del PIB y un superávit comercial sostenido por más de cinco años y que se duplicó en 2015 con el ajuste fuerte en las importaciones (14,5%), mucho menor al de sus exportaciones, que cayeron solamente 2,5%.
Fuente: Elaboración EA con base en datos FMI
Coyuntura cambiante
No obstante, parte de la desaceleración en el crecimiento de China en los últimos dos años obedece a que basó su desarrollo en la demanda externa, siendo afectada por la crisis de la economía mundial en 2008, que fue una de las más agudas en décadas. La inversión extranjera tanto en la industria como en el mercado inmobiliario fueron los pilares del crecimiento, dos segmentos que hoy están en crisis por el bajo dinamismo de la demanda por exportaciones y la sobreoferta creada en el mercado inmobiliario.
Quizá el indicador más diciente de la coyuntura actual es la inversión privada en activos fijos, que después de registrar tasas de crecimiento del 10% promedio anual hasta 2015, se redujo mes a mes durante todo 2016 hasta llegar a un crecimiento de 2,1% año corrido a julio pasado, de acuerdo con la oficina de estadísticas del gobierno chino. La inversión es una variable con impacto en el crecimiento de mediano plazo, por lo que este comportamiento podría tener impactos en el crecimiento de los años venideros. Consciente de este impacto el gobierno chino ha emprendido un programa de gran magnitud para el desarrollo de infraestructura, que aspira compensar el fuerte ajuste de la inversión privada.
Fuente: National Boureau of statistics of China[2]
Buena parte de este resultado obedece a la situación de la industria. En los primeros siete meses del año el crecimiento de la industria se estabilizó en torno al 6%, una cifra menor al 10% que traía de meses anteriores y que da cuenta de los fuertes excesos de capacidad y la caída de la inversión privada.
Sin embargo algunos indicadores van mejorando
En cuanto al mercado inmobiliario, las estadísticas oficiales chinas reseñan un aumento paulatino de los precios de la vivienda desde diciembre de 2015, que llegó al 7% anual en julio, lo que podría estar indicando que los inventarios, que todavía se mantienen altos, podrían empezar a reducirse.
La coyuntura reciente muestra otras cifras positivas sin sobresaltos para la economía china. Las ventas del comercio han crecido 10% y han estado en línea con las proyecciones de los analistas[3], las importaciones, incluso, registraron en los primeros siete meses del año un descenso del 10,5%, fuerte pero menor al 14% registrado en 2015[4].
El PIB creció 6,7% en el segundo trimestre del año y las estimaciones apuntan a que terminará el año en esta cifra. Un informe de la OCDE publicado en junio pasado, revela que “El crecimiento económico se establece en el límite inferior del rango de proyección de esta entidad, desde el 6,5% en 2016 al 6,2% en 2017[5]. Destaca que a pesar del descenso en la inversión y la lenta recuperación del mercado inmobiliario, el consumo se proyecta boyante.
Aunque destaca los riesgos crediticios que se desatan de la desaceleración económica, pondera las acciones en términos de política fiscal, en pro de la recuperación económica. Sin embargo, este organismo afirma que si los estímulos al crecimiento y la mayor inversión pública en infraestructuras anunciada no se dirige a los sectores adecuados, podría generar un desplazamiento de la inversión privada y la creación de desequilibrios en el futuro. Destaca la necesidad de que el gasto que debe dirigirse a las áreas que promueven el crecimiento inclusivo a largo plazo, tales como la igualdad de acceso a los servicios públicos y la ampliación de la red de seguridad social.
Las medidas más recientes adelantadas por el gobierno chino en torno a una política agresiva de estímulos al crecimiento que han mejorado las perspectivas sobre esta economía hasta mejorar su calificación por parte de las agencias internacionales como Moodys[6].
Otro de los aspectos a destacar es la revisión al alza del crecimiento de la economía china en 2016 y 2017 por parte del FMI. En el mismo escenario que anunciaba un menor crecimiento proyectado para el promedio de la economía mundial manifestó que la economía china crecería 0,1 puntos porcentuales más, para llegar al 6,6% en 2016 y se mantendrá en 6,2 en 2017.
El desarrollo de la economía china en el futuro está en el crecimiento de su clase media. El consumo de tecnología y bienes y servicios de mejor calidad y sofisticación en alimentos, bebidas, artículos de marca y bienes durables sostendrán la transición de esta economía[7]. Las políticas del gobierno chino apuntan a fortalecer el mercado interno y el mejoramiento de los salarios vía una mayor productividad. El desarrollo del consumo y el aumento del bienestar y la seguridad social, donde el crecimiento de los sectores de servicios públicos y la cobertura en salud serían los más sobresalientes y aquellos donde estarán las mayores oportunidades de inversión.
[1]http://www.focus-economics.com/countries/china
[2] http://www.stats.gov.cn/english/
[3] http://www.focus-economics.com/countries/china
[4] http://www.tradingeconomics.com/china/imports
[5] http://www.oecd.org/economy/china-economic-forecast-summary.htm
[6] http://www.cnbc.com/2016/08/17/moodys-upgrades-chinas-economic-growth-outlook-after-stimulus.html
[7] http://money.cnn.com/2016/07/12/news/economy/china-economy-forecast-q2/