Sectorial de la semana
La recuperación de la Economía Mundial: siete variables en juego
Las cifras de la economía global muestran que en 2016 la recuperación no se da al ritmo esperado y las proyecciones de algunos países se ajustan. Una combinación de fuerzas es la causa de esta dinámica, que ha tenido un fuerte impacto en la economía Colombiana haciendo lenta la recuperación de la industria, los ingresos del sector agropecuario y el balance del sector gobierno, que recibe menores ingresos de la actividad petrolera.
Por qué no se consolida el crecimiento global y qué se espera en los años venideros?. Qué podría ser como antes y que cambiará definitivamente?
1. Recuperación de la economía mundial. En octubre pasado las proyecciones de crecimiento de la economía mundial en 2016 fueron revisadas de 3,2% en abril a 3,1%, lo que significa que la economía mundial crecería a la misma tasa de 2015[1]. Para Estados Unidos se pronostica un crecimiento más débil de lo previsto: en 2016 el FMI ha ajustado su pronóstico de 2,4% en abril a 2,2% en julio y a 1,6% en octubre y también predice un discreto 2,2% para 2017. Las noticias moderadamente positivas tienen que ver con una revisión al alza del crecimiento de China (6,5 en abril a 6,6 en octubre) al igual que el de la zona euro (1,5% a 1,7%), a pesar del impacto del Brexit.
Fuente: Proyecciones EA y FMI
Colombia ha sentido el menor crecimiento de Estados Unidos, pues después de un buen desempeño exportador hacia este destino en 2015, en 2016 las exportaciones totales a Estados Unidos se reducen 5,8%[2] registrando crecimiento en productos como plásticos, vehículos, maquinaria eléctrica, productos metálicos y frutas, pero descensos fuertes en textiles, confecciones, azúcar, café y combustibles, entre otros.
2. El sector financiero. La existencia de proyectos de inversión y tasas de interés atractivas son la base de la dinámica del sector financiero. La reducción de la inversión global y los bajos intereses que reinan desde la crisis de 2008 para impulsar el crecimiento de la economía mundial, tienen impacto en los balances de algunos de los grandes bancos. El FMI ha llamado la atención en el caso del sistema bancario europeo, en particular de varias instituciones como el Deutsche Bank, el HSBC y el Credit Suisse, bancos que de acuerdo con el FMI de sufrir dificultades severas pondrían en riesgo el sistema financiero global[3].
3. China. La recuperación mundial después de la crisis de 2008 se dio por cuenta del destacado crecimiento de la economía china. Desde 2015 se observa que este país ajusta su demanda de importaciones a un ritmo mucho mayor que el de sus exportaciones. Por el momento las proyecciones de crecimiento mejoraron en octubre pasado y las importaciones registran caídas menos fuertes, lo que podría ser una señal de mejora.
4. Comercio mundial. La revisión de las cifras de comercio mundial dejó en 2015 muy pocos sectores exportadores en crecimiento, una tendencia que ha continuado en 2016. La organización mundial de comercio señala: “El comercio mundial crecerá más despacio de lo previsto en 2016 y aumentará tan solo un 1,7%, cifra muy por debajo del 2,8% de la previsión de abril, según las estimaciones más recientes de la OMC. Las previsiones para 2017 también se han revisado a la baja y ahora se espera que el comercio crezca entre el 1,8% y el 3,1%, frente al 3,6% estimado anteriormente. Si el crecimiento del PIB mundial se sitúa en un 2,2% en 2016, como está previsto, el ritmo de crecimiento del comercio y la producción este año sería el más lento desde la crisis financiera de 2009”[4].
La reducción del comercio mundial implica que muchas economías producirán bienes más costosos para sus ciudadanos, en perjuicio del ingreso real de quienes los consumen.
A la baja demanda mundial se suma la fuerte devaluación que han registrado las economías del mundo en respuesta al cambio anunciado más no concreto en la política monetaria de Estados Unidos, que encarece las importaciones.
Aunque debería promover las mayores exportaciones, por la baja demanda mundial nos hemos quedado con un efecto que no es positivo: el encarecimiento de las importaciones y mayores costos de materias primas en las industrias locales.
5. Mercado petrolero. Mientras el Barril de petróleo Brent registró hasta mediados de 2014 un valor en torno a los 100 dólares, a partir de ese año no ha podido superar la barrera de los 50 dólares, una tendencia que podría consolidarse en el mediano plazo por cuenta del reingreso al mercado petrolero de Irán y la mayor capacidad instalada de Estados Unidos por cuenta de la tecnología del Fracking.
Fuente: Indexmundi.
6. Otras materias primas. Las cifras de la FAO muestran una recuperación en los precios de los alimentos desde principios del año y que mejora mes a mes, una mejora que se observa en la carne, el azúcar, los lácteos y los aceites pero no a los cereales, que todavía registran caídas en precios. Otras fuentes estadísticas también muestran recuperación en los precios del café y de otras materias primas, lo que comenzaría a enviar señales de progreso en la demanda. En contraste, si bien el crecimiento de los precios del oro es señal de debilidad de la economía global, mientras se mantenga es un factor que favorece a la economía colombiana, pues representa el 4% de los ingresos de exportación del país.
7. Socios comerciales. De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, América Latina tocará fondo en su desaceleración en 2016 con una contracción de 0,6%, para pasar a un crecimiento positivo en 2017 del 1,6%. Aunque de todas formas pronostica un crecimiento potencial de mediano plazo en la región más bajo, destaca que desde mediados de año el mercado crediticio ha sido más favorable a los países de la región.
Ecuador, Perú y México han registrado mejoras en su proyección de crecimiento: México y Perú cerrarán el año en positivo con crecimientos del 2,1% y 3,7% mientas Ecuador registrará un descenso en su economía del 2,7%. Por el momento, el crecimiento positivo de Perú no beneficia a nuestras exportaciones pero se aspira que con su consolidación en 2017 se logre registrar tasas positivas como las que muestran las ventas e México.
Se destaca la recuperación de Brasil y Argentina. Brasil reportaría crecimiento positivo en 2017 del 0,5% después de registrar su economía un descenso en torno 3,3% en 2016, mientras Argentina caería 1,8 a un crecimiento del 2,7% en el año.
La economía global muestra señales que son positivas pero insuficientes para impulsar el crecimiento económico global, que sigue mes a mes a la espera de un cambio de tendencia definitivo. La recuperación de los precios de las materias primas, el menos discreto crecimiento de la economía China y de Europa, el aumento del empleo en Estados Unidos aunque su proyección de crecimiento sea menor, son factores positivos pero aún insuficientes para generar un mayor impulso en la demanda global. Es necesario que la dinámica económica global comience a reflejarse en el crecimiento del comercio y la demanda de importaciones de China, para consolidar la recuperación de nuestros países.
[1] Para 2017 la proyección pasó de 3,5% a 3,4%.
[2] Variación año corrido enero-agosto
[3]http://www.imf.org/es/News/Articles/2016/10/04/AM16NAGFSR100416?cmpid=TW&hootPostID=9aa25e2a5ba53e50bc5333d7464a81ef