Sectorial de la semana

ORO: activo atractivo?

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Los precios del oro registraron en febrero de 2016 un crecimiento del 9,2% el mayor desde julio de 2011. Ante la marcha reciente de la economía mundial, la volatilidad de los mercados de valores y el lento crecimiento de las tasas de interés, inversionistas de todos los tamaños buscan un destino para su inversión.

Después de un enfriamiento del mercado en los últimos tres años, los precios del oro en los mercados internacionales empiezan a registrar un repunte en los últimos meses: las miradas retornan hacia este mineral como activo de reserva.

 

Es hora de invertir en oro? Cómo está Colombia en este mercado?

Por su alto valor intrínseco, el oro representa una reserva económica en épocas de turbulencias mundiales. Después de la crisis financiera de 2008, la inversión de muchos agentes se volcó hacia el oro, generando una presión en los precios hasta alcanzar récords históricos en 2011 cuando una onza de oro llegó a valer 1,7 dólares frente a los 889 centavos que costaba en 2009.

Colombia se benefició de ese auge, aumentando la inversión extranjera y local en el sector y generando divisas para el país y regalías. En 2011, por ejemplo, las exportaciones de oro llegaron a representar la mitad de las exportaciones de Antioquia, la región de mayor concentración de la producción aurífera del país seguida del Chocó.

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Fuente: SIMCO, sistema de información minero colombiano.

 

En 2015 Colombia produjo 54 toneladas de oro, una producción que se ha venido ajustando desde 2012, cuando el país tuvo un récord histórico de 62 toneladas. Con todo, es preciso señalar que desde 2009 la producción del mineral sufrió un cambio estructural, por cuenta de la mayor inversión y produción del sector en un mercado de altos precios internacionales. El Banco de la República señala que el 10,7% de la oferta aurífera está en cabeza de dos grandes empresas mineras y el restante 89,3% de la producción del oro corresponde a la pequeña minería.

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Fuentes: Banco de la República y SIMCO

El oro que se produce en Colombia se exporta, una oferta que va al ritmo de los precios internacionales. El mercado del oro se prepara frente al cambio en las expectativas de la economía mundial, cuya recuperación es positiva pero más lenta de lo previsto. Los precios internacionales siguen siendo elevados frente a sus promedios históricos, por lo que el sector continúa dando aporte al desarrollo de la economía colombiana en empleo, inversión y sus regalías.

 

Oportunidades y riesgos.

 

Impacto positivo en las exportaciones colombianas. Los precios del oro registraron en febrero de 2016 un crecimiento del 9,2% el mayor desde julio de 2011. Como se observa en el gráfico, la onza troy alcanzó un valor de 1,199 centavos de dólar. Este cambio de tendencia tiene varias implicaciones: la primera está asociada al impacto en los ingresos por exportación del país, que es positivo, pues son el 3,5% de nuestras ventas externas y son determinantes en economías regionales como Antioquia y Chocó. De igual manera, permiten compensar de alguna manera la caída en los ingresos de otros minerales como carbón, ferroníquel o petróleo. Su importancia en términos de generación de ingresos por exportación se ve aún más si se tiene en cuenta que por ejemplo, las exportaciones de café representan el 4,5% de las exportaciones totales.

 

Balanza de pagos. En términos de la Balanza de Pagos, en donde todos los países cuentan con parte de sus reservas en oro, en el caso de Colombia estas representan un porcentaje pequeño de las reservas, menor al 2%, por lo que es un ingreso extra aunque no define la tendencia de las reservas.

 

Activo de inversión-refugio. Los precios del oro han mostrado algunas fluctuaciones en el pasado y podrían tener un comportamiento más cíclico en la medida que la economía mundial asiste a un escenario de incertidumbre. Es una inversión a largo plazo si se tiene en cuenta que por ejemplo, después de la crisis de 2008 el oro alcanzó su pico de precios en 2011.

Si la decisión es de inversión existen firmas que garantizan la compra, custodia y almacenamiento de oro físico en un depósito. También se puede invertir en el metal con otros mecanismos como los fondos de inversión, que financian a las empresas productoras de oro alrededor del mundo o también adquiriendo certificados[1].

De este modo o de otros más tradicionales, puede considerar llenar más el cofre de la abuela, más aún si no aprovechó el boom de precios de 2012. Todo dependerá del tiempo que haya conservado este valioso activo: si inició con esta tradición para asegurarse ante la recesión mundial, en 2009, puede estar esperando más del mercado y más bien podría querer guardarlo un poco más de tiempo.

Pero si usted es la abuela, es hora de darse la gran vida con su cofre, pues si inició a llenarlo en el 2002 o antes, el precio del gramo de oro se ha triplicado desde entonces y podrá cosechar el fruto de varios años de espera.


[1] http://www.expansion.com/mercados/2016/02/12/56be4e65268e3eeb1a8b4612.html